“EL DIA DESPUES” DEL PARO AGROPECUARIO SEGÚN LAS ENCUESTAS

Los “daños no deseados” de una guerra; en este caso de la reciente refriega entre el campo y el gobierno nacional, que incentivó la paranoia inflacionaria de algunos, quizás sin darse cuenta y en defensa propia, y la avivada de otros que ya están dejando la vívida impresión de que el gobierno nacional está “herido en un ala” (metáfora campestre muy gráfica para la ocasión) y que se viene el “sálvese quien pueda”.
Sino que alguien explique, (sobremanera el “Observatorio” de la UBA, tan propenso a identificar responsables de los pesares nacionales entre la prensa) cómo puede ser que el precio, por ejemplo del desodorante, haya aumentado durante el conflicto entre el campo y la ciudad; que se sepa, no contiene soja entre sus principios activos. Ni hablar de los productos directamente relacionados con el sector agropecuario, que ya están a precios escandinavos.
Argentina debe ser el único país del mundo donde fracasa la ley de la oferta y la demanda; “seguramente cuando se normalice la provisión en las góndolas, al haber mas demanda que oferta, los precios se retrotraerán”, nos explicaba un economista al finalizar el paro del campo. Nada de eso; siguen con los mismos aumentos y van por más.
ADELCO acaba de señalar que en el término de un año, desde marzo de 2007 a marzo 2008 los precios de la canasta de primeras marcas se incrementó en un 36,72 % y la de la canasta de productos más baratos en góndola un 37,14 %. Pero más preocupantes son los datos si se comparan los primeros trimestres del año 2007 con el año 2008, de tal suerte que los precios de la canasta de primeras marcas se incrementó en un 5,6 % en el primer trimestre del 2007 y un 11,17 % en el primer trimestre del año 2008. y la de la canasta de productos mas baratos en góndola un 7,12 % en el primer trimestre del 2007 y un 12,85 % en el primer trimestre del año 2008.
Por lo tanto – dice la entidad - de esta comparación surge un dato inquietante: el aumento de precios de productos básicos se estaría duplicando del año 2007 al 2008 y si estos números se proyectan podríamos estar en un alza de entre el 45 al 50 % anual.
Los números del conflicto.
El programa “Desafíos Productivos” de CableVisión Santa Fe convocó al encuestador Horacio Robustelli y al Lic. Manuel Cavia del Observatorio Social de la UNL para que den a conocer las mediciones realizadas durante el conflicto entre el campo y el gobierno en cuanto al comportamiento de la población. Las conclusiones son por demás interesantes.
Según el Observatorio de la UNL, que sondeó el conflicto en 16 vecinales de esta capital, el 75,8% apoyó la protesta del agro, y casi el 50% estuvo “muy de acuerdo” con la misma. Un dato que por estas horas es muletilla obligada en los políticos del Interior: el 48% de los entrevistados consideró que el planteo del campo enfrenta las Provincias con Capital Federal.
Otro detalle interesante que muestra el grado de interés de la “sociedad urbana” por el meandro del conflicto (o rechazo de las metodologías políticas del gobierno central): el 60% se manifestó “nada de acuerdo” con la suba de las retenciones. Quizás el 77% que respondió que el gobierno estaba “haciendo nada” para resolver el conflicto, hable por sí mismo sobre el ítem anterior.
Finalmente, la “suba de las retenciones móviles” y “disparidades entre Buenos Aires y el Interior del país” fueron los principales motivos según la gente que generaron el conflicto de acuerdo con la encuesta de la UNL
Por su parte, el encuestador local Horacio Robustelli trabajó en las Provincias de Santa Fe y Entre Ríos en las localidades de Venado Tuerto, Rosario, Rafaela, Conglomerado Santa fe (Santa fe-Santo Tome) Esperanza, San Javier y conglomerado Reconquista (Reconquista –Avellaneda) y las entrerrianas Colon, Paraná, Gualeguaychu, Concepción del Uruguay, Concordia, Villaguay, Victoria, Nagoya, Federal y Crespo.
De esta manera, el 71% en Santa Fe y 73% en Entre Ríos consideró que el gobierno nacional fue el responsable del paro agropecuario; mientras que el 61% en Santa Fe y 65% en Entre Ríos apoyó los pedidos del campo contra el aumento de las retenciones.
En cuanto a los cacerolazos que se llevaron a cabo en distintas ciudades de ambas provincias, el 42% de los santafesinos y el 45% de los entrerrianos consideraron que fueron solamente de apoyo al campo; pero un cifra no menor: 31% de los santafesinas y 26% de los entrerrianos dijeron que además del campo, fueron también por otros motivos.
Un dato curioso: el 47% de los santafesinos y el 49% de los entrerrianos estuvo de acuerdo con la metodología del corte de rutas como forma de protesta. Aunque el 76% en Santa Fe y el 77% en Entre Ríos consideró que el paro agropecuario no puso en peligro el sistema democrático.
Otro dato a tener en cuenta: el 79% de los santafesinos y el 81% de los entrerrianos consideró que “es positivo discutir entre todos un nuevo modelo de país en relación a la producción del campo argentino”.
También se pronunció la Iglesia.
En la Misa central de la celebración de la Fiesta de Guadalupe llevada a cabo el último fin de semana en el Santuario de Nuestra Sra. De Guadalupe en esta capital, el Arzobispo local, Monseñor José María Arancedo se refirió al tema expresando sobre el final de la Homilía: “no quiero olvidarme del momento actual que vive la gente de campo. Este Santuario conoce muchas historias hecha oración de los llamados chacareros u hombres de campo. Ellos han forjado desde la fe una cultura del trabajo que sostuvo sus familias y la educación de nuestro pueblo. No podemos dejar de lamentar la situación que han vivido y, al mismo tiempo, de alegramos por el comienzo de un camino de solución. (…)El enfrentamiento no construye ni sostiene el bien común. Ver el presente desde el futuro a construir es el desafío que debemos afrontar y un acto de sabiduría política; descalificar desde el pasado debilita la amistad social, aísla y endurece”.
La imagen del gobierno y de Reutemann.
El encuestador rosarino Andrés Mautone se dedicó a medir las consecuencias de la imagen presidencial (Sra. Presidente Cristina Fernández) y del senador nacional Carlos Reutemann luego del conflicto.
De esta manera, en el momento de máximo enfrentamiento con los sectores del campo, el nivel de aprobación de la gestión de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la ciudad de Rosario se ubicaba en el 29,5 % (de ellos el 3,9 % la consideraba muy buena y el 25,6 % buena); mientras que el 25,6 % de los encuestados la consideraba como regular. Asimismo, el 41,5 % del total desaprobaba su gestión. En síntesis, la imagen crítica de su gestión (imagen regular más nivel de desaprobación) ascendía entonces al
67,1 %.
En torno del senador Reutemann, si bien hizo su apuesta por el sector agropecuario, su apuesta no fue convalidada en términos de mejoramiento de imagen. En efecto, si se compara los valores actuales con los registrados en la medición de septiembre del año pasado, podemos advertir que la imagen positiva de Carlos Reutemann se ha recortado en casi 11 %; mientras que su imagen negativa también lo ha hecho, pero en poco más del 6 %. Por el contrario, la imagen regular del mismo se ha incrementado en algo más del 19 %.

07 abril 2008